Osteopatía Pediátrica

La Osteopatía Pediátrica es una especialización de la osteopatía en la que se utilizan técnicas manuales suaves, adaptadas y específicas para los tejidos del bebé y el niño en crecimiento.

¿En qué casos podemos ayudar a los bebés con Osteopatía Pediátrica?

Bebés que al nacer no inician la succión, los acercas al pecho de la madre y no tienen el instinto de oler, buscar y succionar. El reflejo de succión-deglución es uno de los primeros reflejos del niño en su desarrollo. Este comportamiento se puede observar ya en el vientre de la madre. Por lo general empieza a aparecer entre la 12ª y 13ª semana de embarazo. Durante este periodo, el feto puede demostrar indicios de este reflejo al chuparse el pulgar, bostezar o hacer movimientos de deglutir.

A las 36 semanas, el reflejo por lo general está totalmente desarrollado. Al nacer el bebé debe ser capaz de succionar y tragar de inmediato.

Las compresiones del cráneo al pasar por el canal del parto, con o sin instrumental, pueden afectar a los nervios y a la musculatura relacionada con la succión-deglución. Estas compresiones pueden provocar lesiones intraóseas de los huesos del cráneo del bebé y afectación de los nervios encargados de la succión-deglución.

Gases. Los padres observan el malestar del bebé, se encoge, se retuerce, llanto desconsolado y abdomen duro. Los espasmos intestinales o la falta de motilidad visceral pueden ser la causa de este problema.

Reflujo gastroesofágico. Está provocado por la falta de presión del esfínter esofágico inferior. Permite el paso del contenido gástrico hacia el esófago. El síntoma más destacado es la acidez que provoca una sensación de dolor o quemazón, justo debajo del esternón debido a los jugos gástricos.

En los lactantes los síntomas son vómitos, irritabilidad, rechazo del aliento e incluso síntomas respiratorios que cursan con tos.

Estreñimiento. Pueden ser causado por afectación intestinal o por alteración en los mecanismos nerviosos encargados del control de la defecación.

Es frecuente ayudar a los bebés estimulando el esfínter anal o con el uso de laxantes, sin embargo aunque parezca una ayuda, estamos retrasando el funcionamiento o puesta en marcha del bebé para la acción de la defecación.

Esto alargará la aparición de este mecanismo pudiendo generar la deshidratación de las heces, haciéndolas más sólidas y pudiendo provocar dolor en su evacuación.

Displasia de cadera. Se observará una asimetría en los pliegues glúteos del bebé.

Se diagnostica con una ecografía.

No se sabe con claridad cuáles son las causas de esta patología en los recién nacidos. Se han identificado algunos factores de riesgo, como por ejemplo la posición de nalgas puras del bebé en el embarazo o los bajos niveles de líquido anmiótico.

Inicialmente el tratamiento se realiza con el arnés de Pavlik para favorecer el desarrollo del acetábulo por la coaptación de la cabeza femoral.

Posteriormente, una vez terminado el tratamiento ortopédico, nuestra función será seguir favoreciendo la coaptación de la cabeza femoral, mantener una correcta función muscular e integrar una adecuada función articular con el resto del cuerpo.

Pies zambos. Se trata de una anomalía congénita frecuente en los bebés. El pie presenta una forma o posición torcida. Se trata de una alteración ósea y muscular con afectación de los tendones, son más cortos de lo habitual y desvían el pie hacia el interior.

Es importante corregir este problema o de lo contrario el bebé tendrá dificultades para caminar normalmente. Se utilizan yesos seriados (Método Ponseti) hasta corregir la deformidad. Se inicia a partir de la primera semana de vida. A veces es necesaria una cirugía del tendón de Aquiles. Posteriormente se usan las botas de Ponseti para mantener la corrección. Junto con el uso de estas botas se realiza la terapia manual para normalizar la función articular, muscular y estimular el crecimiento óseo normal.

Irritabilidad o insomnio. Pueden ser provocados por problemas craneales o tensiones en la musculatura cervical que impidan un buen descanso del bebé.

Deformaciones craneales. Existen diferentes tipos de deformaciones craneales, entre las más comunes están la braquicefalia (aplanamiento global de la parte posterior de la cabeza), dolicocefalia (cabeza estrecha y alta que se alarga en sentido antero-posterior) y por último la plagiocefalia (aplanamiento en la parte posterior-lateral del cráneo, de forma unilateral, que dependiendo del grado, la cabeza va adoptando la forma de paralelogramo).

En todos los casos el diagnóstico y tratamiento precoz es fundamental, antes del cierre de las suturas (en los dos primeros meses de vida) para asegurar un mayor porcentaje de éxito debido a la plasticidad del cráneo.